Con la sorpresa todavía reciente por la eliminación de Brasil ante Croacia, largamente celebrada en las gradas por la afición de Argentina, la albiceleste se medía en su caso a Países Bajos. Encuentro del que debía salir el rival de los balcánicos en la primera semifinal del martes. Un duelo muy táctico desde el inicio entre Louis Van Gaal y un Lionel Scaloni que modificaba su sistema. Optaba por copiar la táctica de su homólogo para cortar con más éxito sus salidas por las bandas.

Y sin duda que logró su propósito en la primera parte. Donde la Oranje no pudo encontrar a sus jugadores de ataque: Cody Gakpo y Memphis Depay. Pocas jugadas de peligro generaban los europeos, a los que además tampoco les duraba demasiado la pelota en zonas de ataque. Un poco más la tuvieron los sudamericanos, sin una posesión apabullante pero más certeros en cada duelo, sin perder la posición y sin cometer errores. Y por si fuera poco apareció el jugador al que todos esperaban para marcar diferencias. Esta vez con una asistencia estratoférica.

En la segunda parte, a pesar de los cambios que había introducido Louis Van Gaal, no vimos a la selección de Países Bajos dar el paso al frente que sí se intuyó al final del primer acto. Cada intento de la Oranje por avanzar era cortado con una gran anticipación de los jugadores defensivos de Argentina. Mientras la albiceleste se encontraba cómoda en ese rol, esperando algún robo para sorprender a la desarbolada defensa neerlandesa. Eligiendo los momentos en los que presionar con una buena lectura de partido.

Era el 75′ y el partido parecía sentenciado ya. Si bien en el 83′ Wout Weghorst, en un cabezazo marca la casa, recortaba distancias. Buscaba eso Louis Van Gaal con los cambios y encontraba esperanza para su selección. El partido se embarulló al final, con pocos minutos de fútbol y mucha bronca. Así, en la jugada final del partido, en una falta al borde del área, de nuevo Wout Weghorst anotaría pero esta vez aprovechando una gran jugada de estrategia de Países Bajos. Para marcar sobre la bocina el empate y mandar el encuentro a la prórroga.

Y de nuevo en la primera parte de la prórroga, Argentina tomaba los mandos ante una selección de Países Bajos que se echaba descaradamente hacia atrás. Pero sin apenas encontrar ocasiones ni a Lionel Messi que estaba más diluido entre toda la maraña de defensas neerlandeses. Por tanto apenas vimos jugadas de peligro claras. Si bien en la segunda parte de esa prórroga la albiceleste estuvo mucho más cerca del gol. Como un remate peligroso de Germán Pezzella en un saque de esquina.

Emiliano Martínez le paraba el primer penalti a Virgil Van Dijk. Lionel Messi tiraba el segundo y lo anotaba por el centro. También detenía Martínez el segundo a Berghuis, para que Paredes después anotara perfectamente y doblara la ventaja albiceleste. Koopmeiners anotaba el primero neerlandés en su tercer lanzamiento y Montiel también marcaba el suyo para Argentina. Weghorst anotaba posteriormente y Enzo Fernández fallaba después. Luuk De Jong anotaba el quinto y Lautaro Martínez también, de manera que Argentina se mete en semifinales sufriendo más de la cuenta.