El Abierto de Buenos Aires presenció un emocionante enfrentamiento en la final entre el chileno Nicolás Jarry y el argentino Facundo Díaz Acosta, que culminó con una victoria sorprendente para el tenista local.

El encuentro comenzó con un prometedor triple punto de quiebre a favor de Nicolás Jarry en el primer game. Sin embargo, este rápido inicio no fue indicativo del resultado final, ya que Díaz Acosta mostró una destacada capacidad para defender su servicio y comenzar su remontada.

A lo largo del partido, Jarry mostró una irregularidad preocupante, cometiendo numerosos errores no forzados que permitieron a Díaz Acosta avanzar en el marcador. El argentino, por su parte, devolvió con seguridad y aprovechó algunas oportunidades clave para quebrar el saque de su oponente.

A pesar de un cierre dramático con varios puntos de partido desperdiciados por Díaz Acosta y un prolongado deuce, el argentino finalmente logró asegurar la victoria. Este triunfo marcó el primer título ATP de su carrera y lo elevó al puesto 59 en el ranking mundial.

Por otro lado, Nicolás Jarry, aunque despidió Argentina con una destacada actuación, ahora se prepara para su próximo desafío en el ATP 500 de Río de Janeiro. Tras subir dos puestos en el ranking mundial, el chileno buscará continuar su ascenso en el circuito internacional.