Qatar como hemos podido ver en este Mundial, ha albergado la Copa del Mundo con estadios de última generación, pese a que se comprometió a tener doce estadios preparados y solo entregó ocho. Uno de los recintos que más ha destacado en este Mundial ha sido el 974 Stadium. Un estadio que tiene este nombre porque está compuesto por 974 contenedores marítimos desmontables y porque ese es el prefijo de Qatar.

Este ha sido el único que no ha sido dotado de aire acondicionado porque entre contenedor y contenedor, el aire podía correr para suerte de los jugadores, ya que las temperaturas en Qatar incluso en esta época del año han sido bastante altas. Después de la última goleada de Brasil frente a Corea donde vencieron por 4-1 para llegar a los cuartos de final, se ha tomado la decisión de empezar a desmontar el estadio.

Se habló de que se haría una donación a un país africano, aunque la prensa europea comenzó a señalar hace semanas que podría rearmarse en Uruguay. Para que esto suceda, debería prosperar la candidatura del país para albergar el Mundial 2030 junto a la Argentina, Chile y Paraguay.

Con capacidad para 44.089 espectadores, el recinto será desmontado y sus materiales podrán ser destinados a otros proyectos. Por su moderno y colorido diseño flexible se podrá armar íntegramente en otro lugar con la misma capacidad o para hacer varios estadios más pequeños.

En este contexto, la estructura de acero del techo también puede reciclarse y reutilizarse después del desmontaje. Cuando se haya trasladado solo quedará en ese lugar un lago artificial con forma de campo de fútbol para recordar que allí se disputó el Mundial.