Los Angeles Lakers vencieron al Miami Heat 106 a 93 en el sexto juego de las Finales de la NBA ganando la serie 4-2 y así proclamarse como los nuevos monarcas de la liga.
Desde el primer segundo de juego, el equipo del Oeste de los Estados Unidos salió determinado a terminar con la serie y no tuvo piedad, llegando incluso a tener hasta 30 puntos de ventaja una vez finalizados los dos primeros cuartos.
En el tercer cuarto, la cosa no mejoró para el Heat y la brecha de puntos seguía abierta a favor de los Lakers, con una actuación magnifica de LeBron James y Rajon Rondon, quien se robó el show convirtiéndose en el máximo anotador de su equipo algunos pasajes del juego.
Poco antes del termino del ultimo cuarto, precisamente con 3:22 minutos por jugar, ya los Lakers pasaban la barrera de los cien puntos, quedando 101 a 78 prácticamente asegurando el titulo de la NBA.
Los Lakers alzaron el decimoséptimo trofeo de su historia, y el primero desde el 2010, empatando a los Celtics como los equipos mas ganadores.
LeBron James fue elegido como el MVP de las Finals y en este partido anotó su onceavo triple-doble de las finales con 28 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias.